and I say

wake up and be ~

jueves, 13 de diciembre de 2007

Perdón

Un vacío intenso me recorre la espina dorsal,
Provocando un escalofrío cálido y habitual,
Desencadenando un suspiro seco inanimado,
Sin omitir un sonido que opaque el silencio,
Aquel que asesino la lluvia en ese pálido Enero.

Veo las gotas agolparse contra el frágil cristal,
Amenazan con quebrarlo, atravesar la barrera,
Entre la cruda realidad y un sueño dormido,
Me despierto de mi letargo para escucharla,
Trae palabras olvidadas con el viento.

Observo la ventana, esperando una respuesta,
El reflejo de mis ojos en su tibia lágrima,
Casi perfecta, la creación de una gran tristeza,
Trato de entender el dolor que conlleva,
Siento culpa y me uno a su llanto agonizante.

Quisiera largar una palabra al aire para consolarla,
Pero es inútil, no podría curar su profunda herida,
Lejana como aquella estrella empapada de luz,
Sufriendo como la luna sin reflejo espejado,
Eterna, sin principio, sin fin, una condena injusta.

Podría gesticular la bendita palabra que repito en mi mente,
Pero mi boca se cierra lentamente, por miedo,
Quizás sea en vano decirlo ahora, pero creo que debo,
Es posible que escuches las palabras en el viento,
Tome el valor y la dije, despacio y susurrando: Perdón.

3 comentarios:

marcela dijo...

que lindo este poema me gusto!

esta bueno darse cuenta, y tomar valor para pedir perdon cuando nos equivocamos..

saludos!

Unknown dijo...

Me gustó mucho. Y también me quede pensando otra vez en lo de la palabra esa... esa con la que uno intenta decir tanto, pero que suena a tan poco... creo que es una palabra hipócrita (?)

lobo dijo...

A veces es preciso
que las mareas suban y luego bajen
y que el horizonte
se pierda entre los mares.
Que la conciencia se esfume
y reaparezca,
que la lagrima venga
y después se pierda.
Es preciso algunas veces,
que podamos darnos cuenta
lo que nos duele,
y perdonemos al resto
y nuestros entes.



TE mando un abrazo, Sami.

Hasta la próxima.

Lobo