Diario de un alma nº46

Wherever you go, el pasado y las consecuencias te siguen. Una vez una frase me llegó e introdujo una idea en mí. Cuánto corremos, escapamos y buscamos alejarnos de todo aquello a lo que le tememos, y no ponemos esa misma energía ni ímpetu en realizar lo que queremos. The funny fact is que si corremos del pasado y tratamos de evitar las consecuencias de nuestras acciones, estamos huyendo de la vida y de nosotros mismos, porque le tememos ¿sólo a mí me parece cínica la forma en que somos tan patéticamente hermosos? Lo que no entiendo, es por qué no vemos lo que es tan obvio, o quizás lo vimos y nos volvimos a asustar, escapamos and here we are again. Cuando corres en círculos y volves al principio, viendo el espejismo de lo que eras, creyendo que esta maldita vez, no vas a volver a hacer lo mismo. Me río, porque somos una máquina de mentiras, actores y con un profesionalismo para el escapismo ¿a quién queremos engañar? 

Somos la contradicción personificada, no queremos morir porque nos da miedo no saber que va a pasar o perder todo lo que tenemos, pero también le tenemos miedo a vivir genuinamente, así que estamos en ese nudo conflictivo en el cual no queremos morir, queremos vivir pero no sabemos cómo, cuando figuramos cómo nos da miedo, y vamos por la vida pataleando de un lado a otro porque no tenemos las agallas de hacer lo que queremos ni hacernos cargo de nosotros mismos, ni de la vida; y creo que si hay algo en lo que somos buenos, además de las mentiras, la actuación y el escapismo, es en tener miedo de absolutamente todo. No sé ¿cuál es nuestro problema? definitivamente la aceptación es uno de los más grandes. 

Llegamos a este mundo, no entedemos por qué todo es como es, la existencia es un misterio, nos aferramos a la ciencia, a lo espiritual, el conocimiento y a todo aquello que nos enseñaron para saber movernos en un mundo que no elegimos, del cual nos enamoramos y desenamoramos todo el tiempo, para compartir el juego con millones de personas que están tan o más confundidas que nosotros, y pasamos como podemos por la vida tratando de cultivar éxitos y metas cumplidas sobre lo que quisimos de nuestra vida, buscamos amor, intensidad, pasión, amistad, lo que sea que creamos que nos va a hacer bien,, felices y después de que a pesar de todo lo que nos quejamos, nos gusta vivir, tenemos que empezar a aceptar que nuestro viaje se termina para abrazar la inminente muerte, si es que tenemos el privilegio de verla venir y no ser arrebatados de la vida en un instante. 

Aceptemoslo, esto es un desastre, pero es hermoso, es nuestro desastre, quizás no sepamos cómo ni quién ni qué ni nada, pero es lo que tenemos, acá está, es nuestro. Nadie sabrá jamás lo que siente tu corazón ni va a hacer la misma sinapsis que vos, nadie puede vivir tu vida más que vos, estamos solos, y estamos juntos estando solos. Y quizás no consigamos las respuestas, o sí, pero no deberíamos depender de eso ¿no? Si en vez de correr tanto y tenerle tanto a miedo a no saber vivir, vivimos y hacemos camino andando ¿no lo aprovecharíamos mejor? I mean, por el momento, esto es una tragedia, hay un final en este túnel y no importa cuánto corramos, no vamos a escapar de él, o al menos por ahora, hasta que descubramos como ser inmortales, supongo. Entonces, basta de correr, no hagamos que pase aún más rápido, ya es bastante corto nuestro viaje por más vivencias atemporales que vivamos en él.

Yo quiero vivir mi viaje y dejar de correr en círculos, estoy cansada de ver mi silueta en frente mío para darme cuenta que estoy otra vez donde empecé, mentirme diciéndome que va a ser distinto y volver a re-caer ante todos mis miedos. Estamos solos, pero estamos solos juntos; tomemosnos de la mano y demos un paso hacia adelante.